Hace más de un año que la pandemia nos obligo a mudar el trabajo a un mundo virtual. La transición fue complicada, y ciertamente nadie imaginó que un año después seguiríamos con este modo de vida.

Con la llegada de las vacunas muchos líderes y empresas planean el regreso de sus colaboradores al trabajo en las oficinas, sin embargo, es de suma importancia entender y atender las necesidades psicológicas y físicas de todos los empleados para lograr un retorno saludable y eficiente.

Durante los primeros tres trimestres del año 2020 se mantuvieron los niveles de productividad, aún cuando en el segundo se mudo casi al 100% a un trabajo remoto. Estudios han demostrado que la mera supervivencia hizo que las empresas lograran hacer los cambios y ajustes necesarios, pero dichos cambios y ajustes no se pensaron de forma definitiva.

El cuarto trimestre cuenta una historia totalmente diferente. En este trimestre se registró la mayor pérdida de productividad de los últimos 40 años, debido al estrés con el que se ha operado durante más de un año. La liberación de las hormonas de cortisol, dopamina y adrenalina, que son las causantes del estrés, generan reacciones rápidas pero pocos reflexivas.

Para que entendamos un poco más, trabajar bajo las condiciones que hemos tenido en el último año es lo mismo que correr un maratón a toda velocidad, sin dosificar esfuerzos.

El Síndrome del Desgaste Profesional

El Síndrome Burnout o también conocido como el Síndrome del Desgaste Profesional es el estado de agotamiento mental, físico y emocional que resulta del estrés crónico y la insatisfacción laboral.

Para finales del año 2020, estudios reportaron que el76% de los trabajadores del país vecino, Estados Unidos, padecían de este síndrome; Y no es de extrañarse, ya que el cambio de hábitos tanto en el trabajo como en la vida social y laboral, el aumento de responsabilidades y el constante riesgo de salud han derivado en el aumento del síndrome.

Modelo de Trabajo Sostenible

El modelo de trabajo debe ser AEP (Atractor Emocional Positivo), motivador de esfuerzos, optimismo, flexibilidad, pensamiento creativo y resiliencia. Para lograr un modelo así, los líderes deben estar en constante comunicación con sus equipos de trabajo.

El que cada integrante del equipo se sienta escuchado hace que los modelos de trabajo sostenibles sean la mejor opción para la nueva normalidad, ya que el equipo siente el interés de la empresa por su bienestar mental y emocional, y todos trabajan por una misión y objetivos comunes. Las mejores herramientas para afrontar esta nueva realidad serán la comunicación abierta y transparente, la empatía, la colaboración y el liderazgo.