Las emociones son parte de la vida diaria y por lo tanto inevitables en la vida laboral. El líder del equipo deberá encontrar la forma de sobrellevar las emociones de cada colaborador sin menospreciarlas pero que tampoco afecten el desarrollo del trabajo.

En muchas practicas se cree que, si no se reconocen y hablan los sentimientos y emociones, estos desaparecen y se puede seguir sin ninguna alteración, pero eso no es así. Lo mejor es empatizar y aprender a usarlos de manera saludable.

Tras los cambios en las formas de trabajo que ocurrieron por la crisis de Covid-19 se evidenciaron excesos en número y duración de reuniones, reuniones innecesarias. Una de las practicas que más ayuda a aligerar la presión que sienten los colaboradores es realizar una auditoria para detectar la relevancia de las reuniones y así dejar únicamente las necesarias y hacerlas más rápidas y eficientes.

La comunicación es clave, y en estas épocas aún más, así que los líderes deben utilizar una comunicación asertiva y evitar espirales de ansiedad innecesaria.

Cada días es más común medir la productividad de los colaboradores con base en los resultados, y en realidad esto no es malo, pero dado las circunstancias en las que nos encontramos se debe considerar medir los resultados y enfatizar el reconocimiento por el esfuerzo. Investigaciones han arrojado que los elogios y la gratitud por los esfuerzos mejora las relaciones entre colaboradores y superiores, creando mejores ambientes laborales y potencializando dichos esfuerzos.

En las organizaciones hay retos constantemente que a pesar de la laboriosidad de sus integrantes presentan obstáculos y situaciones que pueden ir desde la incertidumbre hasta las crisis económicas y/ó estructurales.

Anteriormente se tenía pequeños espacios de descanso y esparcimiento, tan simples como ir al baño, trasladarse de una sala de juntas a otra, o salir a comprar un chocolate, pero que mantenían el balance entre la distracción y el trabajo combatiendo el agotamiento y aumentando la productividad. Con las formas de trabajo remoto e hibrido y el distanciamiento social, estos pequeños descansos se han perdido y el agotamiento y la vulnerabilidad emocional han aumentado creando confrontaciones y reacciones emocionales fuertes. En estos casos los líderes deben poseer la inteligencia emocional para identificar si la emoción esta aún presente o ya ha pasado y es oportuno hablar para resolver el mal entendido.

Si no se resuelven estos contratiempos se puede derivar en algo conocido como “contagio emocional” en el cual dos o más miembros del equipo experimentan emociones y sentimientos similares complicando el desarrollo del trabajo.

Concluyendo, los tres puntos importantes para evitar que las emociones y sentimientos influyan negativamente en el ambiente laboral los líderes deben empatizar con la situación que están viviendo sus colaboradores, comprender y conectar con ellos sin abrumarlos y buscar resolver los contratiempos y malos entendidos en el momento oportuno.

Basado en “The secret to supporting your workforce in critical times” de P. Michelman, M. West Duffy y L. Fosslien en MIT Three Big Points

5/5

¿Cómo combates las emociones y los sentimientos en el trabajo?